La agricultura Biodinámica

por | Jul 6, 2021 | Agricultura Biodinámica

En Junio de 1924, Rudolf Steiner llamó la atención ante los asistentes al “curso sobre agricultura biodinámica”, sobre las reminiscencias de la sabiduría campesina y sobre las actitudes que posibilitan al hombre del campo durante más de un milenio acceder a los estratos sutiles y esenciales de la naturaleza.

De allí surgió la agricultura biodinámica.

Fue impartido a granjeros experimentados. A sus conocimientos
profesionales se sumaba lo que la antroposofía (método científico para la investigación de mundos suprasensibles) puede ofrecer
con su visión espiritual de la naturaleza.

Hoy tras más de 90 años este método agrícola se practica
en miles de granjas alrededor del mundo. Lo que allí se extrajo de un
conocimiento profundo de las realidades espirituales también da respuestas a muchos problemas surgidos más tarde y que se siguen planteando al día de hoy.


Uno de sus principios era el abono directo para vivificar el suelo, hay
que llevar vida a la Tierra del suelo mismo.

Cada lugar es único por sus suelos, su altitud y relieve.
La Tierra es un organismo viviente. No es conveniente aplicar recetas, por lo cual es importante actuar en relación con las condiciones del lugar, respetando los ritmos cósmicos.

Hace hincapié en la interrelación entre suelos, plantas, animales y el Cosmos, tratando el conjunto como un sistema en equilibrio, evitando en la medida de lo posible intervenciones externas.

La agricultura biodinámica se diferencia de otros tipos de agricultura

…ecológica en el uso de preparados vegetales y minerales como aditivos para el compost y aplicaciones directas para el terreno, así como en el seguimiento de un calendario de siembra basado en el movimiento de los astros.

Podemos ver que no solo la luna transmite y domina las fuerzas del cosmos, sino que todos los planetas ayudan a que suceda todo de forma armoniosa para que el hombre pueda intervenir y cooperar de manera activa en los sucesos.

Para determinar el momento de la siembra, plantación o cosecha se
sigue el calendario biodinámico, fijado en función de los ritmos astronómicos, que especifican los días y las horas más favorables para estos trabajos.

El primer calendario biodinámico

El primer calendario biodinámico que se editó fue el de Maria Thun, estudiosa de la antroposofía y las propuestas de Steiner, quien decidió ponerlas en práctica y hacer ensayos de siembras, y experimentos sobre ritmos de la Luna y otros ritmos cósmicos observando las plantas en su proceso de crecimiento, resultados concretos que fueron publicados a lo largo de los años en su calendario de siembras y 30 años después publica sus observaciones en ¨Constelaciones y Agricultura Biodinámica¨ cerrando un ciclo de una rotación sideral de Saturno trabajando junto a Matthias Thun quien se concentró en el cuidado de los animales y la apicultura según estos mismos programas. Estudios que nos han servido como punto de partida para nuestras propias observaciones y experiencias propias en otras latitudes.

Steiner propuso nueve preparados diferentes para ayudar a la fertilización, que son la piedra angular de la agricultura biodinámica.
Steiner creía que estos preparados transferían poderes sobrenaturales terrestres y fuerzas cósmicas al suelo, son utilizados por su acción dinamizante en el suelo y su riqueza en bacterias beneficiosas y oligoelementos, por lo que colaboran en la prevención de plagas y enfermedades y hacen más fuertes y resistentes a los cultivos.

Están enumeradas del 500 al 508. Los dos primeros se utilizan directamente en el suelo, 500 (“boñiga en cuerno”) y el preparado 501 (“sílice en cuerno”) mientras que los otros siete se utilizan para hacer compost, los preparados propuestos por Steiner, tienen un papel fundamental en las prácticas biodinámicas y su objetivo es promover los procesos vitales dentro de la finca o del huerto y entre éste y su entorno. Los efectos homeopáticos de
estas dos sustancias estimulan las fuerzas de fertilidad del
suelo y las fuerzas de maduración y nutrición de las plantas,
respectivamente.